El desalojo que provocó la muerte de once campesinos y seis policías, además de la salida del poder de Lugo, aguarda ser juzgado. Los cinco encarcelados secundan una huelga de hambre, mientras el presidente Cartes llama a “usar y abusar” de Paraguay.
La masacre que desfiguró Paraguay sigue sin respuestas
(Periodismo Humano, 06-03-14, Paraguay)