Los permisos para generar energía eléctrica aprovechando la fuerza del agua aún están lejos de revertir a manos públicas. Iberdrola, Naturgy y Endesa serían las más perjudicadas si la caducidad de los derechos desemboca en una reversión masiva.
España, un Estado hidráulico (en manos privadas)
(La Marea, enero-febrero 22)